La oscura historia de la “isla del infierno” que vio morir a más de 1.300 personas​

No es la primera vez que la ficción coincide con la realidad, sobre todo si se trata de hechos espeluznantes que creemos ver solo en películas. En esta oportunidad, te traemos la historia de Hashima, más conocida como la “isla del infierno”.

La isla fundada en el siglo XIX, ubicada frente a la costa de la ciudad japonesa de Nagasaki, no tiene más de seis hectáreas. Pese a que fue elegida para rodar algunas escenas de James Bond Skyfall (2012), muy pocas personas se atreven a poner un pie allí.

La zona, también llamada Isla del Acorazado, es conocida por sus minas de carbón submarinas, que fueron explotadas en gran medida durante la industrialización de Japón. En 1959, durante su apogeo, se piensa que vivían más de 5.000 personas, entre los que se encontraban civiles coreanos reclutados y prisioneros de guerra chinos. Sin embargo, desde 1930 hasta el final de la Segunda Guerra Mundial, estos habrían sido obligados a trabajar en condiciones extremadamente duras y sin remuneración alguna.

Según indica la historia, el grupo Mitsubishi compró las minas de carbón en 1890 para proporcionar combustible a la creciente industria de construcción naval del país, y así fundar una pequeña ciudad que tuviera todas las comodidades, como teatros, escuelas y hospitales, entre otros.

No obstante, eso no prosperó, ya que tal como indicó Business Insider, los mineros eran obligados todos los días a viajar un kilómetro bajo el nivel del mar con temperaturas superiores a los 37 °C. En ese sentido, 1.300 trabajadores murieron trágicamente de hambre, agotamiento y desnutrición.

Asimismo, las enfermedades respiratorias graves también eran una causa de muerte común en la isla como resultado del aire del mar mezclado con los vapores que salían de las minas. Finalmente, el carbón de la isla Hashima se agotó, lo que provocó su cierre en 1974.

Por su parte, quienes sobrevivieron trabajando en Hashima la llaman “la isla del infierno”.

En 2015 y en diálogo con The Guardian, uno de los sobrevivientes, Tomoji Kobata, quien tenía 24 años cuando trabajaba en la isla, se refirió a su labor como “agotador” y describió su rol como “uno de los topos”. “Extraje carbón y luego ayudé a desmenuzarlo para poder sacarlo de la isla. Era un trabajo agotador, así que gasté todo mi tiempo libre en tiempo para dormir”, expresó.

“Prácticamente, viví una vida de prisión en Hashima. Me siento horrible y pesado cada vez que recuerdo la época en la que trabajaba en el fondo de las minas de carbón usando solo mi ropa interior”, agregó.

Cabe destacar que la isla reabrió sus puertas al público en 2009 y se convirtió en una atracción conocida mundialmente, sobre todo por las escenas que se grabaron de James Bond Skyfall.

La misteriosa isla del Pacífico donde todos sus habitantes tienen ojos azules y parecen vikingos

Entre los muchos destinos con particularidades de Sudamérica se encuentra una isla en el oeste de Colombia, ubicada en el océano Pacífico, cuyos habitantes padecen un extraño síndrome por el que poseen sorprendentes ojos azules o verdes junto a otras características que forman una cultura particular.

De piel clara, impactantes ojos azules y una historia desconocida para muchos, los llamados “vikingos” residen en la isla Mulatos y parte de Vigía, en la región de Sanquianga.

​ Se trata de Hashima, ubicada frente a la costa de la ciudad japonesa de Nagasaki y con una dimensión menor a las seis hectáreas  En las redes 

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