Un video de solo 25 segundos podría poner tras las rejas a Micaela, una joven que se volvió viral la semana pasada luego de que fuera filmada bailando cumbia y efectuando disparos al aire en Villa Tranquila, en el partido bonaerense de Avellaneda.

En las imágenes, que fueron tomadas por un teléfono celular, se observa a “Mica” junto a una amiga, llamada Denise, que está sentada y ambas escuchan cumbia al aire libre y a plena luz del día. De fondo suena “Cinco amigos” de Pibes Chorros.

“Mica” se mueve al compás de la música mientras agita una pistola. “Pelamos los fierros y todos abajo”, reza el último verso de la primera estrofa de la canción y, en ese momento, la joven pistolera levanta su arma y efectúa dos disparos al aire. La cumbia sigue: “La alarma se acciona y no podemos zafar; llega el comando, nos van a bajar; queremos a un juez, queremos a la prensa; si ellos no aparecen, somos todos boletas”.

Tras la masiva difusión de las imágenes tomadas en Dock Sud, las fuerzas de seguridad bonaerense llegaron hasta un domicilio donde no pudieron localizar a “la pistolera de Villa Tranquila”, pero sí a su amiga que fue identificada, pero no demorada. En tanto, sí fue detenido un hombre, que sería su pareja, y que contaba con un pedido de captura vigente.

Según el parte policial, el hombre que estaba con Denise tiene 48 años y era buscado en el marco de una causa por tenencia de drogas. Este hombre, identificado como José Luis, fue aprehendido y trasladado a la comisaría 1ª de Avellaneda. Además, se incautaron un par de chalecos antibalas y se procura dar con el paradero de “Mica”. Interviene en la causa Solange Andrea Cáceres, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°3.

El barra pistolero que fue detenido el mes pasado

Hace tres semanas, ocurrió un caso similar cuando un barrabrava que sembraba temor en Villa Centenario, partido de Lomas de Zamora, fue detenido luego de protagonizar un cinematográfico tiroteo contra ocho efectivos de la Policía bonaerense que llegaron hasta la vivienda del hincha tras la denuncia de vecinos por los reiterados disparos y amenazas del hombre de 59 años.

La secuencia del enfrentamiento fue tomada por un vecino con un teléfono celular en donde quedó registrada la llegada de los uniformados hasta una vivienda situada en Ginebra y Plumerillo, en Villa Centenario, en cuyo interior se encontraba Rodolfo Adolfo “Manguera” Aguilera junto a uno de sus hijos, identificado como Enzo y de 25 años.

La denuncia comenzó luego de que empleados que realizaban tareas de limpieza fueran amenazados por Aguilera, quien efectuó disparos al aire, lo que derivó en un llamado al 911 de sus vecinos. Tras la alerta, hasta la puerta de la vivienda llegaron cerca de una decena de efectivos de la bonaerense que fueron recibidos a balazos.

Según detallaron desde la fuerza de seguridad provincial, los efectivos repelieron el ataque disparando balas de goma porque en la zona había varias personas que no formaban parte del hecho.

En el video se observa cómo los efectivos le exigen que deponga su actitud, pero Aguilera efectúa disparos desde la planta alta de la vivienda a la que terminan ingresando todos los policías. En ese momento, el barrabrava intentó escapar, a través de los techos, pero fue reducido por uno de los efectivos.

Ya en el interior del domicilio, los policías también detuvieron al hijo del barrabrava porque habría intentado ayudar a escapar a su padre. Además, dentro de la casa encontraron una pistola marca Steyr, calibre .9 milímetros, con seis municiones en la recámara y que habría usado Aguilera para amedrentar a los vecinos y atacar a los uniformados.

También se incautó una bolsa que en su interior tenía 50 balas y 3600 dólares. La investigación del incidente, donde no se tuvo que lamentar víctimas, está a cargo del fiscal Gerardo Mohoraz, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°6 de Lomas de Zamora.

​ Tras la masiva difusión de las imágenes, las fuerzas de seguridad bonaerense llegaron hasta un domicilio donde no pudieron localizar a la mujer que efectúa los disparos, pero sí a su amiga  Seguridad