Un juez permite que se distribuya “El odio” y crece la polémica por el libro sobre un hombre que mató a sus hijos​

El juez español Diego Martínez Pérez, del Juzgado en Primera Instancia número 39 de Barcelona, desestimó las medidas cautelares solicitadas por la Fiscalía de Menores de Barcelona la semana pasada para paralizar el lanzamiento del libro El odio (Anagrama), del español Luisgé Martín, sobre el crimen de José Bretón, condenado por el asesinato de sus dos hijos de seis y dos años en Córdoba, en 2011. La editorial tenía previsto lanzar el libro mañana. De esta manera, el juez entiende que la medida supondría una restricción a la libertad de expresión. Además, indica que la Fiscalía había presentado como pruebas artículos periodísticos con anticipos de la obra.

La madre de los niños, Ruth Ortiz, había solicitado amparo ante el ministerio público por la posible vulneración del derecho al honor y a la intimidad de los menores. También se acusaba a la editorial y a Martín de “intromisión ilegítima” y de querer lucrar con la tragedia ajena. La Fiscalía de Córdoba remitió el caso a la de Barcelona, ya que la editorial Anagrama tiene su sede en esa ciudad, para que fuera un juzgado civil de la capital catalana el que resolviera sobre esta cuestión.

El caso que enciende el debate

El 8 de octubre de 2011, Bretón asesinó en la finca de Las Quemadillas de Córdoba a sus hijos Ruth y José, crimen por el que actualmente cumple una condena de veinticinco años en la cárcel de máxima seguridad Herrera de la Mancha (Ciudad Real), a pesar de haber sido sentenciado a cuarenta años de prisión. En el libro de Martín, el filicida (que había contactado al autor por teléfono) explica cómo mató a sus hijos. El odio concluye con una entrevista presencial de Martín a Bretón.

Después de escribir el hilo de más abajo sobre @luisgemartin, ayer por la noche me contactó por privado. Esta es la conversación que tuvimos.
Sacad conclusiones. https://t.co/wf8LqdxaFV pic.twitter.com/PdzcVtnCC2

— Asun Lasaosa Zazu (@msikusimakusi) March 22, 2025

El juez considera relevante determinar el género al que pertenece El odio, ya que este aspecto resulta “de especial trascendencia a la hora de ponderar los límites de la libertad de expresión (vertientes de libertad de información o creación artística) en relación con los derechos honoríficos de la persona”. Según el auto, las pruebas presentadas resultan insuficientes porque “son artículos periodísticos donde se hace referencia al libro, pero ninguno muestra el contenido del mismo”. Concluye que las medidas solicitadas por la Fiscalía de Menores “no se ajustan en estos momentos a un criterio de proporcionalidad”.

Frente a gente que quiere que la literatura sea Disneylandia, necesitamos editoriales que publiquen libros que nos incomoden y se adentren en el lado más oscuro de la naturaleza humana.

No debería ser necesario, pero toca defender a @AnagramaEditor, Luisgé Martín y la libertad… https://t.co/I6M4NqIKDP

— David Jiménez (@DavidJimenezTW) March 21, 2025

“No puede olvidarse que estaríamos restringiendo el derecho fundamental a la libertad de expresión”, afirma el juez Martínez Pérez. “Es absolutamente imposible hacer un juicio provisional indiciario favorable a la estimación de la tutela que se pediría al juicio principal”, agrega.

Ayer, la Fiscalía de Menores anunció que recurrirá el aval del juez que permite la publicación de la obra cuestionada por un sector de la sociedad española. Cuenta con veinte días de plazo para formalizar el recurso, aunque este no tendría efectos suspensivos, por lo que Anagrama no tiene impedimento legal alguno para publicar la obra mañana mismo, como tenía previsto.

En redes sociales, hay posturas a favor y en contra del autor y de la editorial, que en sus respectivos comunicados compararon El odio con A sangre fría, de Truman Capote, y El adversario, de Emmanuel Carrère (lo que podría haberle dado una pista al juez acerca del género del libro).

Por un lado, se cuestiona el oportunismo, el sesgo “patriarcal” de la obra y el descuido de la editorial al no comunicarse con la madre de los niños antes del lanzamiento del libro; por otro, se reivindica la libertad de expresión y el derecho a leer (o no leer) la obra de Martín, autor premiado por Anagrama, activista por los derechos LGBTQ+, exasesor cultural del presidente español Pedro Sánchez y exdirector del Instituto Cervantes en Los Ángeles.

La solicitada en Change para impedir la publicación del libro cosechó hasta hoy poco más de seiscientas firmas. En redes, circula un pedido de boicot al sello creado por Jorge Herralde décadas atrás.

​ La obra del español Luisgé Martín, del sello Anagrama, da voz a José Bretón, que está en prisión; la madre de las víctimas, Ruth Ortiz, había solicitado que se suspendiera el lanzamiento  Cultura 

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