San Lorenzo le ganó a Deportivo Riestra, en otra demostración de que el fútbol va a salvar su futuro​

Iban 5 minutos, 11 segundos de la segunda mitad. San Lorenzo es un torbellino. Angustia, ansiedad, esperanza (tal vez, porque es lo único que se pierde). No tiene presidente, no hay elecciones previstas y hasta recibe una suerte de amenaza de Chiqui Tapia, el presidente de la AFA. Algo así como un pedido de unidad disfrazada. Figuras sin nombres rutilantes y jóvenes de la casa, verdaderamente, hacen lo que pueden. Jugar al fútbol en medio de un lodazal.

Bastante bien les va: Damián Ayude encontró la fórmula del equilibrio. Pero el rival es de mucho cuidado: Deportivo Riestra, más allá de algunos favores arbitrales, es una formación dura y pareja. Juega al límite del reglamento, está bien arriba en el Grupo B y está en puestos de Copa Sudamericana. Juega con el cuchillo entre los dientes.

El cronómetro lo refleja: cinco minutos, once segundos. En esa fotografía, Jonathan Herrera, de deslucido pasado en el Ciclón, le pega de puntín y seguramente va a ser gol, porque Orlando Gill, el arquero gigante, queda a un costado, descolocado. Había tenido dos intervenciones de salón durante la primera mitad. Una, ante Goitía; otra, ante el mismo Herrera. Ahora, queda fuera de escena. La pelota viaja a la red.

Sin embargo, Gastón Hernández, el capitán cuando el éxodo se potenció en los últimos meses (no hay dinero en la tesorería, solo deudas, más diversas hipótesis de conflictos dirigenciales), se arroja con alma y vida. La pelota le rebota en el cuerpo y, desde ahí, una aventura por el lado izquierdo.

¡DEFINICIÓN GRÁFICA DE PARTIDO DE IDA Y VUELTA! Luego de la salvada épica del Tonga Hernández llegó el contraataque de San Lorenzo y una GRAN pirueta de Cuello para el 1-0 vs. Riestra.

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— SportsCenter (@SC_ESPN) October 31, 2025

El zurdo Báez toma la pelota luego de un rebote y va. Va, va, va. Corre casi 90 metros, cabeza levantada y camiseta transpirada, como todos los pibes del Ciclón. Los que son un aprobado, apuntan al 8, al 9. Los que saben que no les sobra nada, disfrazan la realidad con dignas actuaciones. Todos son figuras sin serlo: toda una declaración de principios, mientras el club se desangra por dentro. El fútbol lo mantiene vivo.

El lateral manda un bochazo al área, que encuentra al Zorrito Ladstatter y su cabeza. El pibe, talento sin pulir, entiende el contexto: hay que luchar, correr y hasta poner la cabeza. Allí, en el área, está Alexis Cuello, que un rato antes lo perdió mano a mano con Arce, el arquero showman, que otra vez repartió alfajores antes del encuentro y salió jugando más de una vez, a pesar de estar disminuido físicamente.

El delantero da una media vuelta en el área y le pega de zurda, una volea sensacional, de pique al suelo, a los 5 minutos, 28 segundos. Como para hacer un cuadro con esos 17 segundos tan reales como mágicos.

Esto es San Lorenzo: defender los colores con el cuerpo, definir en la otra frontera con una poción de magia impensada, casi fuera de contexto. “En la previa, nos sentamos en la misma mesa y le metí presión a Zorrito. ‘Dame una asistencia’, le dije y lo festejamos todos. Esto es muy importante. Es un rival duro, sabíamos que nos iban a dejar tener la pelota y esperar el error nuestro. Teníamos que evitar hacer faltas cerca del área”, advierte el goleador, que en la era Rubén Insua no iba ni al banco de suplentes.

La gente, en llamas por la situación política (contra todos, “que no quede ni uno solo”), repite las estrofas de un himno que, a esta altura, es algo más que un mensaje. Arranca así: “Acá está la gloriosa banda de San Lorenzo, la que no tuvo cancha y se bancó el descenso. A pesar de los años, los momentos vividos, siempre estaré a tu lado San Lorenzo querido. ¡San Lorenzo querido!“. La historia es cíclica: en la cancha del Bajo Flores, lejos de estar comprometido con la segunda categoría, el Ciclón se las rebusca para seguir teniendo problemas serios. Serios de verdad.

Lo mejor del partido

“Si a alguno se le ocurre recurrir a las SAD, los desafilio”, es la amenaza de Claudio Chiqui Tapia. Ya se había retirado Manuel Agote, señalado por actuar en representación de Sebastián Pareja, hombre del Gobierno Nacional.

La situación institucional de San Lorenzo atraviesa un momento límite y encendió la alarma en la AFA. Claudio “Chiqui” Tapia decidió intervenir de manera directa y convocó este viernes a todos los sectores políticos del club a una reunión en el predio de Ezeiza. Allí, el máximo dirigente del fútbol argentino fue tajante: si no hay un plan de unidad y medidas concretas en los próximos días, se tomarán drásticas medidas.

Durante el encuentro participaron figuras de todos los espacios internos, incluido el presidente Marcelo Moretti, que retomó su cargo tras una resolución judicial. También asistieron referentes históricos como Néstor Ortigoza, Andrés Terzano y Christian Evangelista, además de dirigentes cercanos a otros sectores. Hasta Matías Lammens, convocado por el propio Tapia para colaborar en la búsqueda de una salida política.

En las últimas semanas, el club enfrentó serios conflictos administrativos y financieros, al punto de que desde Viamonte debieron cubrir parte de los salarios del plantel profesional para evitar medidas de fuerza. A eso se suma un pedido de quiebra presentado por un fondo suizo y la falta de acuerdo entre los distintos grupos dirigenciales para alcanzar la acefalía, que permita una salida democrática.

Tapia pidió que antes del martes se presente una propuesta de reorganización que incluya a todos los sectores, con el objetivo de recuperar la estabilidad institucional y cumplir con los compromisos económicos más urgentes. Si no hay avances, advirtió que la AFA podría designar una comisión de apoyo o asumir un rol más activo en la conducción del club. Días antes, hubo un encuentro con el plantel.

QUE GRITEN TODOS VAMOS VAMOS LOS PIBES pic.twitter.com/ygLzp6E2N0

— San Lorenzo (@SanLorenzo) November 1, 2025

“Tuvimos una reunión. Nosotros tenemos que enfocarnos en el trabajo. Ellos sabrán qué decisión tienen que tomar con el club. Nosotros salimos a la cancha para dejar a San Lorenzo lo más arriba por siempre”, advierte el goleador Cuello. Que se retira con aplausos, como todo el equipo. Una pequeña ovación por los 17 segundos del San Lorenzo futbolero, el que no sabe de miserias.

​ El Nuevo Gasómetro, al final, fue una fiesta: el Ciclón se impuso con una joya de Cuello  Fútbol 

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