El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS, por sus siglas en inglés) decidió concluir el acuerdo de negociación colectiva que mantenía con los oficiales de la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA, por sus siglas en inglés). Si bien esta decisión puede afectar a miles de empleados, también busca beneficiar los controles en los aeropuertos.

De qué trataba la negociación colectiva del DHS

La negociación fue un proceso mediante el cual los empleados acordaron con el Departamento varias condiciones laborales, con el fin de garantizar que los trabajadores tuvieran voz y voto en diferentes cuestiones. Sin embargo, según indica un comunicado que reveló Fox Business, la mayoría de los oficiales serán removidos de su cargo o reasignados.

El documento, publicado el 7 de marzo, indica que el DHS manifestó que TSA tiene más personas con un “trabajo sindical a tiempo completo” en vez de en funciones de control en el 86 por ciento de los aeropuertos de Estados Unidos. En resumen, de los 432 aeropuertos federalizados, 374 tienen menos de 200 oficiales para controlar.

Lo que DHS busca lograr con las nuevas medidas

La misma fuente indica que el Departamento se amparó en una encuesta a empleados de la TSA, en donde encontró que a más del 60% de los “trabajadores de bajo rendimiento” se les permite permanecer en planta. “No es sorprendente que sigan sin tener un buen rendimiento”, agregaron para resumir la problemática.

Al dejar de lado el acuerdo de negociación colectiva, el Departamento busca mejorar la productividad en líneas generales y permitir que la permanencia de los oficiales se base estrictamente en el desempeño individual, en vez de la antigüedad sindical que ostentan.

El principal beneficio de los pasajeros en los aeropuertos

Con esta medida, indica el Departamento, los aeropuertos serían mucho más eficientes al eliminar obstáculos burocráticos que mejorarán la productividad y reducirán los tiempos de espera de los pasajeros en las filas de seguridad. El DHS agregó que buscan: “Salvaguardar nuestros sistemas de transporte y mantener seguros a los estadounidenses”.

Por otro lado, un portavoz de la agencia explicó al medio citado: “La administración Trump se ha comprometido a volver a aplicar políticas de contratación y despido basadas en el mérito”.

Opiniones encontradas por la política del DHS

La Federación Estadounidense de Empleados Gubernamentales (AFGE, por sus siglas en inglés) expresó que los oficiales aeroportuarios que se ofrecen como voluntarios sindicales representan menos del medio por ciento de todas las horas de trabajo realizadas en la TSA.

“Dieron como justificación una afirmación completamente inventada sobre los funcionarios sindicales, dejando en claro que esta acción no tiene nada que ver con la eficiencia, la seguridad o la protección nacional. Esto es simplemente un pretexto para atacar los derechos de los trabajadores estadounidenses”, dijo en un comunicado Everett Kelley, presidente nacional de AFGE.

Luego de dejar en claro que no está de acuerdo con la medida de DHS, el presidente agregó: “El sindicato ha estado al frente desafiando las acciones ilegales de esta administración contra los trabajadores federales. Ahora nuestros funcionarios de la TSA están pagando el precio con esta acción claramente de represalia“.

​ Con esta medida, indica el Departamento, los aeropuertos serían mucho más eficientes al eliminar obstáculos burocráticos que mejorarán la productividad y reducirán los tiempos de espera de los pasajeros en las filas de seguridad.  Estados Unidos