Después de un chapuzón en la playa por la mañana y un almuerzo frente a un paseo marítimo o con vistas a un área de preservación ambiental; luego los turistas pueden disfrutar de su tarde en un paseo en barco por canales llenos de famosas mansiones o en los pasillos de una de las tiendas más grandes del mundo: Sawgrass Mills. Y el mayor atractivo desde que pertenece al Inter de Miamo es ver a Lionel Messi en el campo de fútbol. Este es el horario de un día típico para cualquiera que visite Fort Lauderdale, la “Venecia americana”, en Florida.

Durante mucho tiempo, Fort Lauderdale vivió a la sombra de Miami, a sólo kilómetros de distancia. Y aunque funciona como un tour estilo “ida y vuelta”, es un destino que merece un lugar en el itinerario de cualquiera que viaje a Florida. Con una buena variedad de hoteles, restaurantes y tiendas, la ciudad se ganó el favor de quienes buscan un lugar más tranquilo que su vecino más famoso.

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Fort Lauderdale es también un popular puerto de salida de cruceros. Empresas como Royal Caribbean, Celebrity Cruises, Disney Cruise Line y Princess Cruises utilizan Port Everglades como base para algunos de sus barcos insignia. Y su aeropuerto internacional también se convirtió en una alternativa para quienes llegan en avión a Estados Unidos.

Pasear por sus ríos y canales

Lo que diferencia a este sitio de muchas otras ciudades costeras del sur de Florida son las llamadas “vías fluviales”, una gran red de canales que conectan ríos y lagunas que están cerca del mar. La gran cantidad de canales le valió al lugar el sobrenombre de la “Venecia americana” y, en lugar de palacios o góndolas renacentistas, lo que se ve es una sucesión de embarcaciones, como lanchas rápidas y yates, amarrados frente a las mansiones de ricos y famosos.

Pasear por los canales es una de las actividades turísticas con más tradición de la ciudad. Los recorridos más tradicionales se realizan a bordo de las embarcaciones amarillas, de grandes ventanas laterales. Durante aproximadamente dos horas, los visitantes navegan por el laberinto de canales, pasando por mansiones que alguna vez pertenecieron a personalidades como los actores David Cassidy, Lee Majors y Burth Reynold, y la entonces pareja sensación de la música pop Sonny y Cher.

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Otro hito importante es el Riverwalk, el largo y sinuoso paseo que sigue parte del recorrido del Río Nuevo, en cuyas orillas hay multitud de opciones de bares, restaurantes y hoteles. El río es la cuna de la ciudad a finales del siglo XIX. Allí se encuentra el edificio más antiguo del condado de Boward, del que forma parte la ciudad. Construido en 1901 como un puesto comercial para el intercambio con los indígenas Seminoles, más tarde se convirtió en la residencia familiar de Frank Stranaham, el fundador de la ciudad. Hoy en día, la Casa Museo Histórica Stranahan es una de las atracciones del paseo marítimo, que cuenta con otras atracciones culturales interesantes.

Dos de ellos están ubicados alrededor del Esplanade Park, una plaza con abundantes espacios verdes en la margen izquierda del río. El Broward Center for the Performing Arts es el principal teatro de la ciudad, y su programación incluye obras de teatro y musicales, muchos de los cuales estarán en Broadway (entre octubre y noviembre de 2022, por ejemplo, habrá algunas proyecciones de “Hamilton”). El Museo de Descubrimiento y Ciencia se centra en la ciencia y la historia natural, con atracciones que van desde reproducciones de animales prehistóricos hasta simulaciones del entorno marciano. Y en ambas orillas hay muchas opciones de bares y restaurantes, para aquellos que simplemente quieren ver pasar el tiempo.

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El río es un punto de parada para embarcaciones de todo tipo y tamaño. Desde estrechos taxis acuáticos, que llevan a los pasajeros a 22 puntos diferentes de ríos y canales, hasta yates de lujo. También hay barcos antiguos (al estilo de los barcos de vapor del río Mississippi) y catamaranes que ofrecen viajes de unas horas de duración, algunos llegando al mar. También es posible explorar la región, así como las calles internas de los bucólicos barrios residenciales, en Segway y en recorridos en bicicleta.

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Grandes playas

Saliendo de la orilla del río, unos pocos pasos toman la vía peatonal hacia Las Olas Boulevard, una calle amigable con aceras llenas de restaurantes con acogedores balcones, tiendas de diseñadores y galerías de arte. Ambiente típico de un destino vacacional, donde caminar sin prisas ni compromiso forma parte del plan. El Boulevard Las Olas es la vía principal que conecta la zona central de la ciudad con la costa, pasando por innumerables canales, naturales o artificiales, que se extienden a medida que nos acercamos al mar.

La parte más conocida de la costa de Fort Lauderdale es Las Olas Beach, una playa típica de Florida, con su paseo marítimo ocupado por gente de todo tipo, y un gran lugar para contemplar el atardecer. En otra playa de la región central, Fort Lauderdale Beach, se encuentra el Hugh Taylor Birch State Park, un parque con ciclovía, parque infantil, áreas de juego y picnic frente al mar. Al lado se encuentra la Bonnet House Museum & Gardens, una casa museo de principios del siglo XX, con una interesante colección de arte y jardines para perder la noción del tiempo.

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Para aquellos que quieran disfrutar aún más de la playa, vale la pena explorar un poco más la costa del Gran Fort Lauderdale. Son 37 kilómetros de costa, que abarcan ciudades vecinas, y algunos de los mejores lugares para disfrutar del sol en Florida, como Pompano Beach, Deerfield Beach, Lauderdale-by-the-Sea y Hollywood Beach.

Messi en Florida

Hasta que Inter Miami complete la construcción de su propio estadio, lo que se espera que suceda en algún momento de 2025, el equipo de Lionel Messi juega sus partidos de la Major League Soccer en el Chase Stadium (anteriormente DRV PNK Stadium o Lockhart Stadium), que se encuentra en las afueras de Fort. Lauderdale, a unos 40 minutos en auto del paseo marítimo.

Con una capacidad para poco más de 20.000 espectadores, el estadio parece bastante pequeño para albergar los partidos de estrellas del deporte mundial, como Messi, Luiz Suárez, Jordi Alba y Sergio Busquets (todos con destacadas etapas en el Barcelona). Pero los días de partido, el ambiente de fiesta es contagioso y suceden muchas cosas tanto dentro como alrededor del estadio. Hay muchas opciones de comida y bebida y, por supuesto, puntos de venta de productos oficiales, que van desde camisetas hasta gorras, casi siempre en alusión al número 10 del astro argentino.

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