Cara cortada​

Espejos fracturados, dispuestos para poder apreciar todos los ángulos, en este caso de un rostro. Abajo, dispuestos sobre la mesa, los elementos necesarios para cambiar esa imagen que se observa a sí misma frente a los cristales. La mujer está seria, todavía a cara lavada, como preparándose para la transformación que se le avecina. Multiplicados por dos, sus perfiles poco a poco se irán convirtiendo para lo que requiera la ocasión. Es la London Fashion Week, que este año cumple su 40° aniversario, y como todos los años las marcas de ropa más prestigiosas presentan sus creaciones. Y este rostro pertenece a una de las tantas modelos que desfilan atuendos que deben lucir para prestigiar esas marcas. Son hombres y mujeres que con sus cuerpos y rostros realzan vanguardistas diseños. Esa tarea está ella por acometer en este momento: maquillar esa cara cortada para convertirla en un todo digno de exhibición.

​ Espejos fracturados, dispuestos para poder apreciar todos los ángulos, en este caso de un rostro. Abajo, dispuestos sobre la mesa, los elementos necesarios para cambiar esa imagen que se observa a sí misma frente a los cristales. La mujer está seria, todavía a cara lavada, como preparándose para la transformación que se le avecina. Multiplicados por dos, sus perfiles poco a poco se irán convirtiendo para lo que requiera la ocasión. Es la London Fashion Week, que este año cumple su 40° aniversario, y como todos los años las marcas de ropa más prestigiosas presentan sus creaciones. Y este rostro pertenece a una de las tantas modelos que desfilan atuendos que deben lucir para prestigiar esas marcas. Son hombres y mujeres que con sus cuerpos y rostros realzan vanguardistas diseños. Esa tarea está ella por acometer en este momento: maquillar esa cara cortada para convertirla en un todo digno de exhibición.  Cultura 

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