Donald Trump, el triunfador de las recientes elecciones 2024 de Estados Unidos, es conocido mundialmente por su trayectoria como empresario y presidente del país, pero tiene una faceta menos explorada: su relación con el fútbol.

Antes de hacerse un nombre en el mundo empresarial y en la política, el republicano mostró un genuino interés por los deportes. Durante su juventud, en la época de la secundaria, fue un atleta talentoso en la New York Military Academy (Academia Militar de Nueva York). donde practicó lo que en Estados Unidos denominan “soccer” en el equipo de fútbol de esa institución, donde se desempeña como delantero.

Este deporte no era muy popular en el país en aquel entonces, pero a Trump le interesaba tanto que participó activamente. Ted Levine, un compañero suyo, aseguró que Trump contaba con grandes habilidades atléticas. “Podía hacer lo que quisiera. Estaba dotado física y mentalmente”, destacó en una entrevista con el medio Business Insider en 2015.

Aunque su verdadera pasión parecía estar en el béisbol, Trump mantuvo una conexión con el fútbol a lo largo del tiempo. De hecho, en varias oportunidades reveló su simpatía por el Manchester United, equipo inglés con el que mantiene una estrecha cercanía debido a su relación con la familia Glazer, quienes tienen una participación mayoritaria en el club desde hace varios años.

Además, el hijo del próximo primer mandatario Barron Trump también heredó esta inclinación por el fútbol; no solo jugó en la cantera del DC United, que compite en la Conferencia Este de la Major League Soccer (MLS), sino que es seguidor del equipo londinense Arsenal.

La faceta futbolística de Trump coincidirá casualmente en los próximos años con el mayor evento del fútbol internacional, ya que el presidente electo en EE.UU. asumirá sus funciones el próximo 20 de enero de 2025 y, dentro de su mandato de cuatro años, Estados Unidos será una de las sedes del Mundial de México-Estados Unidos-Canadá 2026.

Qué deportes practicó Donald Trump

La vida deportiva de Donald Trump abarcó múltiples disciplinas. Además del fútbol, el béisbol y el fútbol americano también fueron actividades que practicó con entusiasmo. Levine, su compañero en el equipo, recordó que Trump podía lanzar pelotas a 128 kilómetros por hora. El hombre contó que, al recibir esos lanzamientos, su mano “quedaba negra y azul todos los días”.

El golf, sin embargo, es quizás el deporte que más ha caracterizado a Trump en la adultez. No solo es un fanático apasionado, sino que ha invertido en diversos campos de golf en Estados Unidos y otros países, como su cancha Trump Golf Links en el Bronx, Nueva York.

La faceta de Trump como propietario y dueño de equipos

Además, como adulto, Trump se aventuró en el mundo de los negocios deportivos como propietario de un equipo de fútbol americano. En 1983, el empresario adquirió a los New Jersey Generals, equipo de la United States Football League (USFL), liga que intentó competir con la NFL. Su compra buscaba posicionar al equipo en un nivel alto, pero, a pesar de los esfuerzos, la USFL no prosperó y terminó desapareciendo en 1986, junto con el equipo.

Trump también mostró interés en el fútbol fuera de Estados Unidos. Intentó adquirir el Atlético Nacional de Colombia, aunque la negociación no llegó a concretarse. Sin embargo, no se alejó de este deporte y mantuvo su simpatía como aficionado.

​ El futuro jefe de Estado jugó como delantero durante su juventud en Nueva York,; además, practicó béisbol, fútbol americano y golf  Estados Unidos